Antes de empezar una dieta, prepara el terreno y cambia algunos hábitos

El ritmo actual hace que a menudo tengamos que comer rápido, fuera de casa y a deshora. Muchas veces terminamos perdiendo el control, nos dejamos llevar por propuestas fáciles, comida  preparada, rápida, bocadillos, comer de camino a, saltarse una comida, picar…. Antes de empezar una dieta, comienza por organizar tu tiempo y planificar tus comidas. Sólo así conseguirás unos hábitos saludables,  que te permitirán culminar una dieta con éxito. Empieza por simples pasos: No bebas calorías. Muchas veces olvidamos que la mayoría de los refrescos, cerveza y bebidas energéticas contienen muchas calorías. Trata de limitar las bebidas carbonatadas y con azúcar y, en su lugar, bebe agua. No compres nunca alimentos cuando tengas hambre. Cuando el estómago manda sobre el cerebro, es difícil tomar una buena decisión alimentaria. Intenta comprar productos frescos o a granel en lugar de envasados o enlatados. Son  más sanos y no contienen sal añadida. Intenta cocinar a la plancha y al vapor. Antes de comértelo, asegúrate de eliminar la grasa. Evita guisos y fritos. Sin embargo, si cocinas un guiso, elimina la capa superior en la se acumula la grasa y si son fritos, sitúalos antes sobre papel de cocina, para que la grasa sobrante se absorba. Añade a tu dieta frutas que te gusten. Muchas veces, cuando se tiene un capricho de dulce, unas simples uvas, fresas o cualquier otra fruta saludable satisfacen esa necesidad. Trata de comer más veces al día y en menor cantidad, alrededor de cinco ingestas diarias. Lleva siempre en el bolso o mochila algún snack saludable. Prepara en casa una guía nutricional propia. Apunta los alimentos que más te gustan. Verás enseguida cuál de ellos es saludable y cuál no. En base a tu guía, compra solamente los alimentos saludables que necesites para una semana. No añadas al plato más comida de la necesaria, intenta mantener una cantidad más pequeña. Siguiendo estos sencillos pasos, prepararás a tu cuerpo y a tu mente para un cambio de hábitos y podrás empezar una dieta sin que te suponga un esfuerzo o una renuncia.